Ya han pasado las Navidades, y en muchos casos (no todos) estas fechas han hecho estragos en los cuerpos. Quien más o quien menos ha ganado unos cuantos kilos, y no precisamente de músculo.
Se han acabado las excusas, ahora hay que ponerse las pilas e ir en busca de hábitos saludables, tanto para recuperar la forma estética, como la salud. Vamos a repasar algunos de ellos, los cuales la mayoría ya conocerás.
Índice de contenidos
1. Coge papel y lápiz, o agarra el ratón
Lo primero que vas a hacer es pararte, o bien con papel y lápiz, o delante del ordenador y escribir. ¿Que escribir? Todo lo que quieres dejar atrás y todo lo que quieres conseguir. Apunta todo lo que te venga a la cabeza (no solo tiene que ser aplicable a la salud).
Además de eso, escribirás los medios para llevar a cabo tanto lo que quieres dejar atrás, como lo que quieres conseguir.
Ejemplos:
▶ Dejar atrás: Sedentarismo Conseguir: Perder peso Medios: Comer menos, comer mejor, hacer más ejercicio…
▶ Dejar atrás: Malos hábitos alimenticios Conseguir: Buenos hábitos alimenticios Medios: Leer este blog, informarse…
2. Busca motivación intrínseca, aléjate de la extrínseca
Una vez tienes claros tus objetivos y los medios para llegar a ellos, es hora de motivarte.
Lo realmente recomendable es buscar una motivación que salga de ti, de tus adentros (intrínseca), que te mueva a hacerlo porque realmente te lo has propuesto y quieres conseguirlo. Es la motivación que sin lugar a dudas, logrará que permanezcas en la buena linea por más tiempo.
No te negaré que una motivación extrínseca (refuerzo desde fuera) ayuda, y no poco. Tal como motivación para una boda, para un casting, por una apuesta etc.
Siempre habrá una motivación intrínseca dentro de ti, pero hay que buscarla…dedícale un tiempo. Si no la encuentras, habla conmigo y la tendrás!
3. Limpia tu cocina, aleja las tentaciones y alíate con lo saludable
Siguiente paso, métete en la cocina. Empieza a abrir cajones y el frigorífico.
Saca todo lo que creas que no te hace ningún bien (salsas, embutidos, panes con 500 estabilizantes, frituras varias, dulces varios etc)
Si bien no te voy a decir que lo tires todo de golpe (el que sea radical que lo haga, o lo regale a las personas que estén pasando hambre) al menos apuntalo todo, y no lo vuelvas a comprar.
Deja en tu cocina las cosas más frescas y naturales posible, y de lo procesado, lo menos cargado de »basura» posible.
Ve a comprar sin nada de hambre (después de desayunar o de comer) y cambia el chip de tu cocina!
4. Dale tiempo para recuperarse a tu organismo
Plantéate la posibilidad de algún ayuno intermitente, en el cual dejes tiempo a tu organismo para respirar, procesar y trabajar.
Puedes hacer una cena temprana, y no comer nada hasta el medio día siguiente. Puedes desayunar agua con limón, o comer una manzana, pero ya está.
Olvidate de los famosos »detox», no sirven para nada…
Esto lo puedes hacer si te notas pesado, »poco limpio», con gases. Significa que tu cuerpo te está pidiendo un cambio rapido y radical.
5. Crea déficit energético
Llegados a este punto, vamos a lo divertido y que más te gusta, el ejercicio, el gran aliado.
Te recomiendo que te plantees aumentar el gasto calórico a lo largo del día, es decir, actívate, muévete más.
No me vale con que vayas 30 minutos al gimnasio todos los días, y después te tires en el sofá a mirar la televisión.
Si consigues moverte y hacer más cosas a lo largo del día, el déficit será mucho mayor y te será mucho más fácil perder peso.
6. Planifica tu semana
Has llegado a este punto, de verdad, enhorabuena, estás haciendo las cosas muy bien ?
Ahora párate otra vez y observa que tal es tu cantidad de ejercicio diario. Puedes planificar la semana, las rutinas que vas a hacer, los ejercicios, la intensidad, el volumen etc.
Si tu objetivo es la pérdida de peso, puedes hacer circuitos de ejercicios en casa o en el gimnasio, además de andar, correr, o ir en bici.
Tienes muchas posibilidades, planifica con cabeza y de manera saludable.
7. Varia y diviértete
Este punto va un poco unido con el anterior.
Si lo que quieres es seguir mejorando, vas a tener que variar, ya sea jugando con el tiempo, con la distancia, con ambos, o cambiando de ejercicios, deportes etc.
Dale a tu cuerpo diferentes estímulos y te responderá con magníficos resultados.
8. Disfruta del proceso, disfruta del momento
Ahora solo te queda disfrutar.
En cuanto vayas viendo las mejoras, tu motivación intrínseca aumentará, creando así un habito saludable para siempre.
Disfruta de la liberación de endorfinas, de la superación personal, del reto que supone saltar muros y disfruta cuando te levantes después de haberte caído, porque te caerás alguna vez ?